sábado, 31 de julio de 2010

La tormenta rubia

Ayer quedamos Dani, Raúl, el Llinares y yo para echar una timbita de PRO a lo grande, un 2 vs. 2 con multipat adquirido por Jesús que, tras ser testeado por nosotros, funciona muy bien y ha sido sin duda una buena compra.

Tras multiples partidos acumulando derrotas Raúl y yo conseguimos ganar un partido muy trabado y luchado contras un suertudo Dani y un alcoholico Llinares.

Fue un España – Valencia.

Lo más importante es que Raúl y yo a final de la tarde nos habíamos convertido en un tándem competitivo que era capaz de poner contra las cuerdas al Llinares y su secuaz.

La gran anécdota era que se celebraba el vigésimonoveno cumpleaños del Llinares e ingerió unas 7 latas de cerveza Voll-damm con lo que al final de la tarde… dobló… dobló de una manera considerable.

Hasta aquí lo importante de la sección de timba y resultado.

El Llinares cogió una castaña impresionante de la cual se vió seriamente perjudicado notando los efectos del alcohol nada mas levantarse del sofá… ni siquiera se podía mantener en pie.

Caminábamos por el cedro cuando de repenté se detuvo y nos dijo “sopem açí..açí..” No podía con su cuerpo de tal “menla” que había enganchado. 7 latas de Voll-damm y 2 mojitos pudieron con un hombre que, a sus 29 años, nos decía en mi casa: “Yo només hem bufe en casalla…”. Ahora sabemos que no es así.

Echó la pota 3 veces en la misma acera del garito donde cenamos, luego se fue al servicio o como le decía yo “se fue a la habitación de pensar” a meditar sobre su actuación. Luego cuando el resto terminamos de cenar, mientras el Llinares seguía pensando en la habitación… pedí que le envolviesen el bocadillo para llevárnoslo.

Al cabo de un rato se cenó su bocadillo y sorprendentemente le volvió el color a la cara. Entramos al Matisse y se pidió un gyntonic, con dos cojones!! Impresionante!! Había resurgido de sus cenizas.

Se tomó dos gyntonics y un wishky con naranja. Luego fuimos al “taytantos” a terminar de “dar pena” y allí se volvió a tomar otro gyn. Vamos, estaba pletórico.

Y luego a la vuelta a casa, decidió sabiamente que Dani le llevase con el coche a casa. Buena elección.

Pues nada, solo me queda decir, ¡¡felicidades Llinares!! ;P

2 comentarios:

Vicent dijo...

Que crack el Llinares. Això si que es resurgir de les seues cendres com l'Au Fènix!!! Està fet de bona pasta!

tÒni dijo...

Fue increíble... ;P